Pateando piedras.

Estos temas de Los Prisioneros me parecen aún más buenos hoy que cuando los escuchaba a principios de los 90. Los conocí cuando estudiaba en la Católica de Chile, admiraba la letra, al mismo tiempo profunda y superficial, y la gran voz de González. Siempre recordaba sus frases: (1) y nooo mee digaaas pooobre; (2) pateando piedras, guau, guau; (3) qué muevan las industrias, las industrias, que muevan las industrias. Ahora que los escucho de nuevo, me parece que seguirán por siempre, eternos, característica de lo verdaderamente extraordinario. Los Prisioneros, el mejor rock del pueblo al sur de EE.UU. En comparación con el reggeton absurdo de algunas bandas de hoy, parecen música clásica.